martes, 16 de septiembre de 2008

Sigo usurpando palabras

Prometí que copiaría esta crítica que apareció en el ABCD de las artes y las letras en la edición impresa de la penútima edición de agosto de 2008. La firma Juan Ángel Juaristo y también se la agradezco.

Esta primera novela de Eva Fernández me ha interesado por varios motivos. No el menor su pretensión de dar voz a una generación, aquella que sale a la palestra en los últimos años del franquismo. Dicho así, la cosa no es nueva: Hay muchos pertenecientes a aquella generación a los que, por edad, les toca echar cuentas, eso es lo que se llama hacer balance de una vida. De esos retratos generacionales se ha nutrido una pequeña parte de la narrativa española que se hace hoy, pongamos las novelas de Clara Sánchez, o de Manuel Rico, donde se retrata desde distintos ángulos aquella generación perteneciente a una clase media florecida por un crecimiento económico intenso y un tanto enloquecido. Pero lo que distingue a esta novela, por ejemplo, es que esa generación a la retrata tenga sus orígenes en la clase obrera: esa rareza en el tratamiento – pues no es usual en la narrativa española, señorío de la clase media- da la medida del coraje de esta obra y de lo novedoso de las historias que cuenta, unas historias que parecen incluso fundirse en un tono colectivo cuando lo que se lleva ahora, sin discusión, es la individualidad a toda costa, aun mermada. Un buen comienzo

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Eva,

He leído otro comentario a la novela en la página que abajo te indico y que no sé si has visto. Pégale un vistazo.

http://florayfauna.blogspot.com/2008/08/inmediatamente-despus.html

Besitos.
Flor